Si el Amor tuviera cara, bien podría ser ésta…
Maka
Un momento de soledad
de paz
y la tarde es mía.
Me puedo sentar a leer
sin sentirme culpable.
Sin pensar que debía salir
a comprar el líquido para desmanchar las alfombras
o bajar a jugar con la niña.
¿Cómo será, me pregunto,
no sentir incesantemente
que uno debería ocupar varios espacios al mismo tiempo?
No pensar, mientras se tumba uno con un libro,
que se debería estar haciendo otra cosa.
Asumir, como hacen los hombres,
la importancia del tiempo
que dedicamos al propio enriquecimiento.
Las mujeres
tenazmente sentimos
que le estamos robando tiempo a alguien.
Que quizás en ese preciso instante
se nos requiere
y no se cuenta con nosotros.
Precisamos
todo un entrenamiento
para no borrarnos, minimizarnos,
constantemente.
¡Ah! ¡Mujeres, compañeras mías!
¿Cuándo nos convenceremos
de que fue sabio el gesto
de extenderle a Adán
la manzana?
Gioconda Belli (Nicaragua, 1948), poetisa y novelista.
Maka
“Cuando dejé atrás la Venta de las Angustias y entré en las Alpujarras, tuve la impresión de cruzar una frontera precisa y de penetrar en un mundo extraño que se volvía hacia sí mismo, encerrado en una quietud intemporal. Multitud de pueblecitos se escondían entre silenciosas cordilleras, indiferentes a ese otro mundo que quedaba fuera, lejano y confuso. La carretera ascendía por las montañas. A medida que iba subiendo crecía la intensidad del silencio que silbaba en mis oídos. Cuando al fin divisé el Valle del Poqueira me quedé anonadada: era el paisaje más bello que yo había visto en mi vida. Los pueblos blancos parecían dormir, apretados como líquenes, en la ladera y en la cumbre de una montaña inmensa. Después, la intensa luz de sol de esta tierra y la solemnidad del paisaje me provocaron tal exaltación, que por unos instantes desaparecieron todos mis temores.”
* Imagen tomada en Pampaneira (Alpujarras de Granada, España).
Adelaida García Morales (Badajoz, 1945), escritora española. “El Silencio de las Sirenas” (1986), obtuvo el Premio Herralde de Novela y el Premio Ícaro.
Maka
Planeta Libre es una película francesa, dirigida por Coline Serreau y estrenada en 1996.
Sinopsis
En un lejano planeta, alrededor del año 6000, sus habitantes son seres muy avanzados que viven aproximadamente unos 250 años. Han prescindido de los objetos materiales y se comunican telepáticamente. Éstos han alcanzado el grado máximo de civilización gracias a una vida sencilla, ecológica y con una alimentación crudivegana.
En la reunión anual de la comunidad siempre surge la misma pregunta: ¿alguien quiere ir a la Tierra? Nadie se atreve a hacer el viaje a este peligroso y primitivo planeta, hasta que Mila, la hija del último hombre que estuvo allí, se presta como voluntaria. Esa vida feliz a la que está acostumbrada choca con el caos de un París estresante, lleno de ruidos y contaminación. Con una comida horrible y donde una cosa primitiva llamada dinero todavía está en uso.
Maka